Fuente: Nuevo diario, Click aqui

La Dra. Cecilia Laportilla, jueza de Género, hizo lugar al pedido de la Dra. Josefina Arges, abogada defensora del inculpado, quien había sido detenido el 13 de agosto último.
Tras permanecer 46 días detenido por estar acusado de agredir y lesionar a su pareja, un sujeto fue excarcelado por la jueza Cecilia Laportilla, quien hizo lugar a planteos de la Dra. Josefina Arges, defensora del inculpado, rechazando la preventiva solicitada por la fiscalía.
La causa se inició el 12 de agosto del corriente, cuando la víctima sostuvo que tras una discusión el acusado le habría agarrado los cabellos y arrojado al piso, propinándole golpes en la cabeza.
La defensora indicó que la jueza ordenó el allanamiento y detención de su cliente, otorgando los días 12, 13 y 14 para la realización del mismo. “El 13, siendo las 22.15, personal de la comisaría del barrio Belén se apersona en el domicilio de mi cliente, siendo recibidos por la denunciante, quien informa que el imputado no estaba. Los oficiales ingresan a la casa, hallan al imputado y le dan una feroz golpiza. Sin poder defenderse y en presencia de sus hijas de 8 y 9 años lo llevaron a la comisaría, donde continuaron con los apremios ilegales, los cuales fueron denunciados”, reveló la letrada. Al día siguiente y al intervenir el Comité contra la tortura, el acusado fue trasladado a la Comisaría 9ª.
Luego se le recepcionó la declaración de imputado, y se realizó formal denuncia contra los tres uniformados identificados y personal policial que actuó el día de la detención, por las lesiones y se solicita la excarcelación. .
En audiencia anterior se planteó la nulidad de la detención por haberse realizado en un horario ilegal, porque el allanamiento había sido ordenado para otro domicilio, no donde fue hallado, y porque el procedimiento fue llevado a cabo sin la presencia de testigos. Sin embargo el planteo fue rechazado, y se prorrogó la detención del sujeto.
«Al ratificar la denuncia la mujer dijo que el sujeto no la había golpeado, que solo quería que se fuera de la casa, y no tenía otra forma más qué haciendo una denuncia. Además, en Cámara Gesell su hija de 9 años -quien presenció la discusión- expresó que su padre jamás golpeó a su mamá y que solo discutieron. La único testigo que la fiscalía llamó a declarar dijo que era una especie de confidente de la denunciante y que si existían discusiones como en toda pareja, pero que la misma no habría sufrido golpes». aseveró.