Desde las 9 de la mañana. Vital, la versión de José Miguel Abraham, quien gatilló su pistola 9 mm. La trayectoria del plomo, según peritos de Gendarmería.
Con el relato dominante del cabo 1º de policía, José Miguel Abraham, declararán hoy los cinco funcionarios de la Seccional Quinta, juzgados por diferentes responsabilidades en el homicidio de la adolescente Silvia Maldonado, el 16 de junio del 2019, en el Bº Gas del Estado.
Desde las nueve de la mañana, los vocales Juan Carlos Storniolo, Daniela Campos Nittinger y Graciela Viaña de Avendaño escucharán la versión de Abraham, a quien la Fiscalía atribuye cargos por «Homicidio doblemente calificado en función de su cargo». Lo asisten los abogados, Diego Lindow, Valentina Bravo Colomer y Josefina Arges.
Para la Fiscalía, Abraham capitaneó un procedimiento en el que hubo un allanamiento irregular. Como Silvia les impidió ingresar a su casa, en medio de una batahola con proyectiles lanzados por otras personas, el funcionario extrajo su arma reglamentaria y devino en el triste final de la víctima.
Los otros funcionarios
En orden decreciente de cargos, también declararán, Juan Carlos Chávez, Fabio Cristian Kooper, Cristian Hernán Bravo y Ramón Ángel Mansilla. Las imputaciones enrostradas son «abuso de autoridad» y «violación de los deberes de funcionario público».
De los testigos que declararon ya en el juicio, se destacaron dos expertos (peritos balísticos) de Gendarmería Nacional, a quienes la Justicia encomendó las pericias y/o recorrido del plomo homicida.
La hipótesis fiscal es que Abraham extrajo su Itaka con balas de goma. Solo él sabe por qué, la suplió por su pistola reglamentaria y abrió fuego desde una distancia oscilante entre 13 y 15 metros.
Quebrado, aterrado por las consecuencias sangrientas, después Abraham confesó en la Quinta haber sido el autor del disparo, aunque se justificó afirmando que desconocía que tuviese una bala en la recámara de su arma reglamentaria. El reproche penal de hoy es por qué su pistola carecía del debido seguro.
En debate, cuatro años después, los peritos habrían señalado que -primero- el plomo habría impactado en el piso; luego se estrelló contra una pared y en sentido contrario (en tercer lugar) fue directo hacia el cráneo de la víctima. Es decir, con ello sugirieron que el policía habría apuntado al piso, ¿o bien se trató de un tiro involuntario?.
Lo medular del debate
Ese presunto zigzag de la bala se transformó ahora en la trama medular del juicio oral. El pasaporte que puede salvar, o no, a Abraham de la perpetua, más no redimirlo del «homicidio simple», o «culposo», sugirieron al cierre de esta edición los expertos.
Jueves, encendidos alegatos y viernes, veredicto
Una vez que todos los policías concluyan sus declaraciones, tras una jornada agotadora, sobrevendrá la incorporación de la prueba documental.
El jueves próximo, el alto cuerpo escuchará los alegatos. Se prevén duelos verbales ante criterios contrapuestos. Dado al tenor de las estrategias, todos asumen que la Fiscalía abogará por la máxima pena, en consonancia con la querella, deslizaron las fuentes.
Por el contrario, la defensa bregará por la absolución de Abraham; o plan B, que sea acusado por figuras más leves, más no la prisión perpetua.
Es decir, Lindow y compañía instarán a que el tribunal reemplace el «homicidio doblemente calificado» por el «homicidio simple», o bien «culposo», trascendió al cierre. El veredicto sería ventilado el viernes venidero.
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